Canalizado por: Ma. Claudia Martín.
Noviembre 27 de 2011
Desde que estamos muy pequeños, empezamos a ver la vida a través de las otras personas, en nuestra niñez hacemos todo lo necesario para ganar el amor de nuestros padres y familiares, entonces hacemos todo por “ser buenos hijos” y por tener el amor de nuestros padres, comenzamos a perder la esencia de lo que somos.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhR6vhN5SIgZS5K49GLLjjk5H89-DRw3D8uE-n6ah2QU8RfReWBM_OFs1NBEV5intPOKkS9rGp5wpukTqQ2fASvQW-UodS4NLLFZuSeD3PC-utDxi2-DHE5kq72F5E3iGGy8FnEQo0lTgE/s320/677507_13911257.jpg)
El amor verdadero no tiene condiciones, solo ama sin importar nada más, no busca retribuciones, no juzga, no inflinge solamente es…
En este círculo vicioso de “ser lo que no somos” perdemos nuestra libertad y decidimos establecer un patrón aun mas vicioso y es el de querer controlar a todas las personas y cosas en nuestro entorno, no le damos aire a las otras personas para ser ellas mismas y finalmente nosotros tampoco somos lo que queremos ser.
Nos acostumbramos tanto a vivir nuestras vidas así, que no tenemos idea de cómo volver a ser nosotros mismos y mucho menos de sentir que venimos a hacer a este planeta.
Lo bueno de tomar conciencia de todo esto es que este proceso se tiene retorno¡¡¡¡ les voy a brindar hoy unos tips que les pueden servir de ayuda.
1. ¿Si tuvieras en frente un medidor de felicidad dónde estaría tu registro? ¿Arriba en medio o abajo? ¿Por qué?
2. ¿Cuáles son tus prioridades de vida?
3. ¿Tu energía está dirigida hacia tus prioridades de vida?
4. ¿Haces cosas que te gusten a ti o te la pasas dándole gusto a todos?
5. ¿Te preguntas cuál es tu misión de vida?
6. ¿Te gusta lo que estás haciendo?
7. ¿Lo que haces favorece al bien común?
Al revisar tus respuestas a estas preguntas, puede ser una buena opción iniciar un proceso de cambio hacia encontrar dentro de ti nuevas oportunidades.
En el próximo blog cuando hayan tenido el tiempo de revisar a profundidad esta información les entregará algunas claves para hacer un cambio.
Bendiciones de amor y luz.